viernes, 11 de febrero de 2011

Conversaciones Insustanciales sobre Música (VI)

¿Se puede cambiar la música del coche… de otra persona?


Sabido o no, es que los miembros de garajeland rara vez se desplazan en coche, propio nunca, en coche rara vez. Lo cierto es que eso permite que la música que escuchamos sólo sea elegida por nosotros mismos o por el tipejo con gorra de rapero (o del tonto de las series juveniles americanas, nunca lo tuve claro) que decide deleitar al resto del personal con una selección de canciones que nunca deja acabar y suenan como la FM a medio sintonizar. Esta situación dictatorial de ir poniendo la música que me gusta me crea cierta tendencia a sufrir cuando no tengo posibilidad de elección, o como poco no veo el momento oportuno de intentar poner ese cd recopilatorio tan ameno que he preparado especialmente para el radio casete. Lo cual me lleva a preguntarme si es posible cambiar la música de un coche que no es el tuyo, y si existe esa posibilidad, como explotarla al máximo.


Cuidado con la gente con la que vayamos en un coche, es posible que no le guste demasiado tu recopilación de rumbakalao.



Cuando sip lo podremos hacer:

Grado de confianza cinco, es decir, te pueden ver en calzoncillos sin que te sientas incómodo por no saber donde meter las manos al no tener bolsillos. Es un grado de confianza estándar, aunque no en ningún caso es estricto, cada uno que vea cual es el suyo, como la RAE, garajeland no impone, sólo limpia y no sé qué más. No obstante, incluso dado este punto, siempre habrá que pedir permiso, cosa de esas incómodas normas de mantener la educación.

Inventándose cosas. Seguramente este punto dependa mucho de la credibilidad del conductor y su capacidad para soltar el complemento que suele llevar en las manos, el volante, para atizarte un par de sopapos. En cualquier caso, insinuar sin atisbo de duda que “hoy sería el cumpleaños de Gene Vincent” puede darnos una oportunidad de poner ese recopilatorio suyo que justo tenemos en las manos. Siempre apuesten a que nadie sabrá ese tipo de datos (generalmente).

Cuando todos, y cuando digo todos incluyo a la junta de la trócola del vehículo donde va montado, se encuentran de acuerdo contigo. Las victorias con un ejército potente dan menos satisfacción que las individuales, pero al menos son victorias.

Grado de desesperación latente o entrada en bucle de audición. No se descarte llegado el momento idóneo, el perder completamente la cordura para hacer más latente su frustración. Si no saben cómo hacerlo sería suficiente con pasar una hora en un jardín de infancia. Creo que en una ocasión, tras escuchar tres veces seguidas el segundo disco de Estopa estuve a punto de alcanzar ese estado (eso, o era una parada cardiorrespiratoria).

El conductor y usted son la misma persona (también puede ser tu gemelo de manos, pero no es lo mismo). En caso de no ser así, mire fijamente a los ojos a la otra persona y pídale el matrimonio.

Cuando no lo haremos:

El conductor tiene un nivel de mala hostia de grado cinco (no confundir con el grado cinco de confianza o las consecuencias pueden no ser las esperadas). Repetidos intentos de acercar la mano al radio casete pueden hacer que el grado de mala hostia del elemento musical opresor aumente de nivel paulatinamente. No interesa nada esa opción, saquen a relucir su diplomacia suiza si es que la tienen a mano.



Muy posiblemente, ser MUY pesados tenga como consecuencia llevarnos puestos los dos alerones, uno en cada oreja


Sumado un conductor con mala hostia de grado tres y acompañado de una novia de grado dos, puede parecer poco, pero, ¿han visto como muere Paulie Gatto o Carlo Rizzi en El Padrino? Yo que ustedes no me fiaría del que vaya tras su asiento. Desde este punto ir añadiendo elementos en contra, sean del grado que sean nos pone en una difícil situación, sólo salvables con la patraña oportuna o la típica falacia.

Si el dueño es de un intelecto superior hay que abstenerse, sería imposible competir con Sanchez Dragó, Pedro Ruíz o algún tertuliano acostumbrado a los micrófonos. Si además creen innecesaria la música que se salga de las directrices de un cantautor hay que ir asumiendo que iremos escuchando a Jarcha el resto del trayecto.

Cuando hemos sido nosotros los que hemos elegido el disco, es raro conseguirlo, pero hay que demostrar cierta fortaleza ante las adversidades, y un número ilimitado de ocupantes que no quiere escuchar un especial de melenudos psicodélicos no deben hacernos cambiar de opinión, ni disculparnos, recuerden la rabia que eso le da a Homer.

Nota importante: Pese a lo que pueda parecer, acepto normalmente lo que me ponen, si bien haber explicado eso no hubiera llevado más de cinco minutos y no nos hubiera leído ni nuestras respectivas abuelas.


PD: Os dejamos con Ridin´ In My Car de NRBQ. Con canciones así de maravillosas nadie osará ponerse en tu contra y existirá el completo acuerdo y satisfacción.


9 comentarios:

Savoy Truffle dijo...

Bueno, amigos. Habeis tocado un tema fabuloso, sobre todo porque lo he vivido. Y lo he vivido en sus diferentes facetas.
Caso 1: De hecho siempre fuí Dj amateur con los amigos, mis viajes a Alicante (a la playa en verano) iban salpicados de mi música siempre que respetara el gusto del conductor, amigo, pero con gustos clásicos (Police, Dire Straits) hits conocidos... en fin... viaje cómodo. El día que me dió por poner una cinta (en aquel coche eran cintas) llamada "Psicodelics songs" mi amigo el conductor me espetó que no volviese a poner eso o me tiraba del coche en marcha.
Caso 2: En otro caso, por ejemplo, el conductor era Troy McClure y claro, cuando la sartén por el mango la tiene él, aceptas sin más, y degustas, aunque no todo te guste, siempre descubres cosas nuevas. Aunque hacía sugerencias eran declinadas amablemente por Troy.
Caso 3: El más placentero sin duda. Yo pongo mi música en mi coche, y aquí tenemos dos vertientes, tres, cuatro e incluso... cinco.
a)Si llevas a tu chica pues has de complacerla y poner algo que le guste y al volumen que ella diga, aunque a veces me salte esa norma.
b)Si llevas a un amigo, intento poner algo que creo le va a gustar a un volumen normal, e inclusive descubrirle algo novedoso para él.
c)Si es una amiga, pues intentas que haya algo de música decente por debajo, a volumen bajo, mientras la conversación manda.
d)Si llevas a un grupo de gente estamos en las mismas del caso c) pero con la incomodidad de que a veces no te dejan conducir con tanta voz. Si son familiares, eso te obliga a poner cosas que ellos entiendan y tragen bien, para no provocarles.
e)El mejor de todos. Cuando yo pongo la música que me gusta y disfruto como un enano al volumen que me da la gana.
Saludos amigos.

Charlie don't Surf dijo...

El otro día puse a los Manowar (dios los bendiga) en el coche y al principio, típico, sorpresa y risitas en la parte de atrás, poco después el monovolumen o turismo se transformó en la jaula de Mad Max III y la carretera parecía una invitación a la batalla.

En general suele haber música variada en mi carro que elijo teniendo en cuenta a sus ocupantes y la situación. Si la compañía es femenina no saco a los Manowar, claro.

Azul Sanchez dijo...

Una vez me hice un Madrid-Valencia con Bisbal como única compañía sonora, dicen que fue por amor, pero yo creo que lo hice por idiota, ella nunca me lo agradeció (ni siquiera puede imaginarse lo que eso fue para mí)...y si infame es su música son mucho peor las fotos del libreto....terrorífico.
Abrazos!

61 y 49 dijo...

Bienvenidos de nuevo al debate del bloc.

Mesié Trufé: Te digo lo que ha todo el mundo que viaja a Alicante por la A3: pare a comprar Miguelitos para familiares y amigos. Un comentario tan completo queda poco espacio de respuesta.

Siempre hay que pensar en el pueblo, una cinta entera de éxitos psicodélicos o de sucio sonido está bien si se hace con cautela, al oído del pagano hay que acomodarlo poco a poco!

Duras declaraciones las suyas contra el bueno de Troy, el anonimato de la internet permite ahorrarse que le vistan de torero, lo cual es bastante comprensible debido a que Troy McCLure hizo un duro papel en Hoy Asesinamos, Mañana Morimos. En cualquier caso, ¿está seguro de que en el maletero de su coche no está amordazado Greg Townson tocando de forma aleatoria One Note Joe?

Si usted es capaz de saltarse la norma del volumen con la chica, permítame decirle una cosa bien clara: ES USTED UN MACHOTE.

En caso de que yo sea el conductor (pocas veces) soy más transigente, es que yo me concentro mucho conduciendo, soy un poco como Juan Pablo Montoya, y aún así... intento dejar claro quién manda!

Mr. Charlie Don´t Surf: Me lo dejas a huevo. Lo primero es que el casette de los Manowar es un indispensable de toda guantera (benditas sean además las letras del grupo rotuladas a mano con boli bic o similar, en cuantas aquellas pegatinas dejaran espacio disponible para nuestro lucimiento al pincel).

Un amigo mío jeviata tenía el coche atestado de una buena colección de cintas del género, donde se incluye la más mítica a mi entender: la de baladas jevis, por si subía una chica al coche. Eso daría para hablar largo y tendido un post (o dos).

Mr. Blue: Pero hombre, en esos casos busque un abrazo de alguien que le comprenda… o incluso de la chica si disimuladamente puede bajar el volumen. No quiero ni imaginarme el libreto, pero en cuanto puedan meten un holograma del Almeriense haciendo una pirueta lo harán. Tiempo al tiempo.

Entre mis viajes más recordados fue un Madrid-Oviedo en autobús nocturno. No pegue ojo intentando descifrar todas las canciones de una cinta de clásicos españoles (donde recuerdo temas de Alejandro Sanz, Miguel Bosé y Ella Baila Sola) en modo instrumental y tocadas con flauta dulce. No me he vuelto a subir a un autocar tras ponerse el Sol.

Como siempre, muy agradecido me ando con todas sus sabias palabras. Abrazos para todos.

Savoy Truffle dijo...

Don 61 y 49: Siempre compro Miguelitos cuando voy a tierras levantinas, e inclusive de los de chocolate (que son los que le molan a la pareja).

El oido del pagano, al que tuve a su gusto durante mucho tiempo, tenía que dejarle claro que el que ponía la música era Savoy Truffle.

Disculpe usted, a Troy lo he tratado muy bien. Son hechos, pero de cuando esto pasó camino de un festival de rock en Gijón. Por aquel entonces no conocíamos a los Hi-Risers ninguno de los dos. Ya digo, no le he puesto mal, digo que íbamos en su coche y el mandaba. Puede ser que luego hiciese a posteriori lo del maletero, pero no tengo noticias.

Bueno lo del volumen con la chica, ya se sabe, son negociaciones, y depende de como ande ella de humor.

Yo conduciendo soy como Alonso, pero necesito llevar mi música puesta, sino me desconcentro.

Un brazzzzo.

Juanjo Mestre dijo...

No sé que decir. Es tan profundo todo que me cuesta. Aunque comparto todos los puntos expuestos por Mesié Truffé salvo el punto a) del caso 3, me percato de que tengo tendencias a intentar pasar olímpicamente del mundo y tratar de poner la música que me apetece, e incluso en los momentos de silencio una mano amiga invisible coge mi mano para que suba el volumen. Es por lo que en alguna ocasión oigo voces que me dicen que siempre tengo que poner mi música o que baje el volumen que hay niños. Al final todo se queda en cacofonías, lo mejor es lo que dice Truffé en el punto e) del Caso 3 y por ejemplo, enchufar NRBQ en soledad.

Brazzzos.

61 y 49 dijo...

Mesié Trufé: No se preocupe por mí, es que a veces tengo el día polemista y no sé como quitármelo de encima. Unas veces dejo comentarios en la web del Marca, otros en la del As...

Que sepa que su cuello es mucho más proporcionado, y que Alonso es muy probable que lleve puesto al Sueño de Morfeo. Por eso de la promoción de un disco, y tal.

Mr. Johnny Dibud: Espero que Iker Jimenez no esté leyendo ese comentario o le hace un fijo de cuarto Milenio (o quinto, con esto de las fusiones ya nunca se sabe), por casualidad, ¿no abre la guantera y, como en un coche que yo me sé, aparece la cara de Luis Aragonés pero con más moho de lo normal para una guantera?

Con canciones de NRBQ se me pasa cualquier mal, incluso el cabreo con el que utiliza el pito porque pita.

61 y 49 dijo...

Por cierto: Agradecido me ando con vuestras sabias palabras. Un brazzo.

Juanjo Mestre dijo...

Pronto tendrás noticias de Iker Jiménez en lo que ya te anticipé dentro de unos encuentros en la tercera fase. Mientras tanto, no he podido evitar preparar un aperitivo dentro de mis labores ministeriales que verás si pasas pronto por tu segunda casa.

Ah, el moho se acumula en todo el salpicadero, y prefiero el careto del Sabio de Hortaleza a visionar las caras de Bélmez, uyyy qué miedo.

Brazzzos