martes, 12 de mayo de 2009

Dormir sin pijama y Transformer de Lou Reed



Lou Reed - Transformer (1972)

Durante un tiempo todos y cada uno de mis discos estaban metidos en cajas de cartón precintadas con ese celo grotescamente ancho y seguramente decorado con los colores de alguna corporativa de mudanzas llamada con algún apellido de amplia ascendencia, del tipo Martínez y Carpio o Rodríguez Mudanzas. Mi deseo sería otro, seguramente alguna compañía llamada La Mudanzita Sociedad Limitada y una cara de Ned Flanders estampada en la cinta de embalaje, pero no era el caso. También me hubiera gustado decir que iba a estar en un hotel, donde amables doncellas me despejaban las sábanas de la cama mientras un educado caballero de acento inglés me preguntaba si esa noche prefería ver un vídeo con los mejores momentos de Menudo Es Mi Padre (que incluiría las escena de “no soy pequeño, soy recortadito”) o simplemente tomar cerveza de barril a elegir, servida por el ballet ruso al completo vestidas únicamente con pajarita. A decir mentira, esa era exactamente mi situación. Estupendo.

El próximo anuncio patrocinado por el Ministerio de Sanidad dirá: "David, Iggy y Lou también confían en la Seguridad Social"



Durante unas semanas mi compañía en un salón ligeramente vacío era una cama supletoria de aproximadamente cincuenta centímetros de ancho y medio metro de largo, y una mesa plegable con un despertador encima que amenizaba el silencio con un ruidito casi a cada segundo que pasaba. Al dar por concluidos estos solitarios días la cosa mejoró y ya tampoco podía quedarme en el salón y la cama plegable, salvo que los nuevos inquilinos quisieran que las cosas permanecieran tal como estaban. No coló, y por supuesto esa nueva gente no estuvo por la labor de mantenerme interino en la sala más grande de la casa junto a su nueva e ilusionante vida. Gracias a ese apoyo familiar tan necesitado a veces, conseguí un estupendo hueco con cama de verdad, y llevarme todas mis pertenencias solo me costó vestirme con ellas y meterlas en los bolsillos para asentarme de nuevo. Una cosa me faltaba, en la nueva habitación había un equipillo pero ni un solo disco que llevarse a los oídos a modo de bálsamo.

Tras comprobar de primera mano que la cartera no contenía demasiado dinero me atrincheré en un refugio de cedes barato con venta de lavadoras, microondas, ordenadores (conste que de esto último solo tengo manía a las lavadoras), muy conocido como centro comercial. Allí me compré una copia del Transormer de Lou Reed, mi gran alimento de consolación para aquellos días desposeídos de algo de música que no surgiera del coche de El tapicero en su Propio Domicilio, y que durante un buen tiempo dicho trozo plástico fue uno de los pocos objetos que me acompañaban a todas partes. Tampoco había mucho donde elegir.


Ojeras características de dormir poco, mal y con un pijama cuyo pantalón se retuerce cada vez que uno gira en la cama

Sobre el disco que comentar: Lou Reed pergeñó una obra clásica, enorme, a salvo de modas, espacio, tiempo y hambrunas; que todo el mundo debería escuchar alguna vez, le guste o no Lou Reed. Un tipo que ya se podría haber retirado muy a gusto de la música después de pasar por la Velvet Underground y que aún así tendría un trabajo más inabarcable que la mayoría de músicos de los últimos cincuenta años (y los que siguen). Aliado con David Bowie y (injustamente desconocido en su labor en Transformer y en la música en general) Mick Ronson. Un disco repleto de historias y detalles que dan para escribir un libro, o dos. Esto son solo unos de los muchos detalles que todo el mundo ya sabe. De lo que no estoy tan seguro (a decir verdad no apostaría por la siguiente posibilidad) es de que Lou Reed pensara que algún día, alguien que se echa a dormir en Alcorcón se plantease mientras le atacan canciones sublimes como “Andy´s Chest”, “New York Telephone Conversation” o “Perfect Day” si es su deber dormir con pijama o sin él en una casa que al fin y al cabo no es la suya.

Me explico: A veces puedo ser un poco isotérmico (invierno duermo tapado y en verano tapado hasta el cuello), pero aquel verano era caluroso y aún no tenía casa, mi ropa se reducía a algo de calle y un pantalón corto que seguramente vivió tiempos mejores. ¿Es necesario en esas circunstancias dormir en gayumbos como uno acostumbra (conste que nunca he entendido la prenda del pijama para dormir, más si ya existen edredones destinados al efecto de mantener el clima camil)? Sé que es un auténtico descalabro mental pensar en esas cosas, pero por aquellas noches era uno de los mayores entretenimientos mentales. Cada vez que leo las letras de Transformer (recomiendo para ello echar un vistazo a “Atraviesa el Fuego, todas las canciones de Lou Reed” aunque sean diez minutos sin pagar en un Fnac o similares) me asombro de la calidad de textos de “Walk On The Wild Side” o “Make Up” (“Your face when sleeping is sublime, and then you open up your eyes, then comes pancake factor number one”), pero invariablemente y pese a todo, cada vez que escucho el Transformer me viene a la mente si debería dormir con pijama o sin él. He disfrutado mucho ese disco, lo sigo haciendo y creo que Lou Reed hizo un trabajo excepcional para que mucha gente se trasladase a un ambiente lúgubre y lleno de travestis en Nueva York, pero a veces la música juega esas pasadas. Lo siento Lou.


16 comentarios:

61 y 49 dijo...

He descartado subir el disco a la red, supongo que el que no lo tiene sabe donde encontrarlo. Si no es así nos lo puede pedir y se lo pasamos amigablemente, tengo dos copias diferentes para elegir. Ya saben, más incluso que pijamas.

Agassi dijo...

Fantástico siempre, incluso aunque solo sea un momentito como en: This is your Land, junto al no menos imaginativo Jim Kerr

Un esquimal onanista (como otro cualquiera) dijo...

Digo yo que por un enlace de descarga tampoco se nos/os van a caer los anillos ¿no? Es que este disco lo tenía, pretérito imperfecto...

Y lo del correo con explicaciones en plan Bart y la pizarrita molaría, sé que es un abuso de confianza, pero molaría.

P.D.: ¿alguno de ustedes va al Azkena?

Space Woody/Jagger dijo...

Dices gran verdad: "Un tipo que ya se podría haber retirado muy a gusto de la música después de pasar por la Velvet Underground".Sin embargo, a pesar de su irregularidad en solitario tiene grandísimas obras maestras: Transformer, Berlin, Street hassle, New York, Magic and loss, y temazos como "Coney island baby", etc. Gran post. Abrazo.

Troy McClure dijo...

Como paladín, abanderado, y tesorero de "Frioleros de Alcorcón, Uníos", te harengo a que duermas en pijama de invierno, calcetines de lana de borreguito, y nórdico hasta el 40 de mayo.

Y luego, cuando el calor apriete, el modelo de ropa interior turbopretor UHF (Un Huevo Fuera) cumplirá su función de dar cobijo a tu vello púbico y evitará escenas de pánico de tu pareja si, como ocurre en mi caso, el manto de folículo piloso ha emigrado de latitudes septentrionales a los trópicos, como gluteos, ombligo, pecho palomo, espalda, hombros, nariz y pabellones auditivos.

No me mola Lou Reed. Me recuerda a un profe de la escuela que me puteó lo indecible para sacarme un título que no me sirve de nada. Si me lo hubiera dicho antes de lo absurdo de estudiar, joder, no le tendría tanta manía y estaría preguntándome (como tú) si son fechas éstas para pasar al turbopretor.

Gran post, "blogger de los guarismos".

A los pies de su señora.

P.S.: ¿De verdad eres de Alcorcón? ¿Seremos vecinos? ¿Es al

Un esquimal onanista (como otro cualquiera) dijo...

Jejeje... Diving se ha quedado a medias, jurl jurl. Eso es que la parienta ha llegado y le ha chafado la conexión "que no puede ser to' el día enganchao' al internet éste de los cojones"

Señor Insustancial dijo...

Transformers es uno de los mejores discos que he escuchado en mi vida y eso que llegó a mi a través de una cinta grabada de tercera mano que estuvo sonando en mi walkman durante todo segundo de BUP hasta que se rompió y pude reunir el dinero suficiente para comprarme el vinilo...en Discoplay...soy viejuno...

61 y 49 dijo...

Hola a todo el mundo.

@AGASSI: Yo sé que todo se ha dicho con buena intención (o para ser más precisos, añadiendo con calzador a ese personaje ochentero y llena estadios), pero creo que, como poco, es algo arriesgado comparar a Lou Reed con Jim Kerr. Cito a Trainspotting (sin ánimo de ofensa, es exagerado pero algo de razón tienen), “Me encantaba lo que hacían al principio, pero desde New Gold Dream han sido una bazofia”.

@ESQUIMAL: Por ser usted: http://www.megaupload.com/?d=8FTO71A8. Solo añadir a su comentario de explicaciones a lo Bart que me he puesto a trabajar en unos guiñoles para explicar las cosas, solo falta grabar el YouTube y que usted me conteste "Al Simpson Móvil!". Lamentándolo (muy mala fecha y economía) no ire(mos) al Azkena. Recomendación aparte de los cabezones de cartel, los Soundtracks Of Our Lives, los vimos una vez sin gran sonido, escenario, etc... y son realmente tremendos en directo.

@WOOD: La verdad es que me considero un mal fan de Lou Reed, me gusta lo exquisito de su discografía, al igual que con la Velvet, aunque creo que el paso de los años ha perdido la sorpresa de escuchar (por ejemplo) Heroin. Deberían dejar de sonar diez años y que algunos los descubramos como si fuera la primera vez, seguramente flipariamos muchísimo más con canciones como “Waiting For My Men”. Se agradecen los halagos, no estoy muy seguro de que sea un texto sobre el Transformer, una disertación de dormir vestido, una idea abstracta sobre las mudanzas...

@DIVING BUCEADOR: Es usted un genio o alguien a quién deberían encerrar en algún lugar libre de Turbopretores UHF. ¡Que capacidad de hacerme reír y dejar frases para la posteridad! ¿De verdad no eres yo?, mi mundo estudiantil se asemeja mucho (salvo que gracias a Gregorio Townson, ningún profesor me hace odiar la música, solo otras muchas cosas), cada día que pasa no hago sino preguntarme porqué estar infernalmente puteado con una carrera cuyo mayor aliciente es que te pregunten si ese aparato tan curioso es una cámara de fotos. Ya sé quién eres: Eres el vecino del quinto que mezcla grabaciones de los Hi-Risers, tira torreznos a mis sábanas recién lavadas y me despierta tres días a la semana (esto es cierto y no exagero) con esta nefasta canción.

@ONANISTA Y DIVING: Pues sí, me ha dejado a medias, cuando soy yo el que lo hace habitualmente con el género opuesto (viva el caso que le hacemos a la RAE).

@SEÑOR INSUSTANCIAL: También me hubiera gustado decir que llevaba en el Walkman un disco como éste, lamentablemente creo que se asemejaría mucho más a esto. Espero que la causa de rotura no fuera el típico manazas que cogía el Walkman para ponerse un sólo casco mientras hacía nudos marineros con el cable del otro y finalmente intentaba sacar la cinta con alicates y llave de grifa. Si tiene muy trillado el vinilo se reeditó no hace mucho, contemplar en grande el plátano que tiene en el pantalón el tipo de la contraportada merece la pena. De viejuno nada.

Un abrazo general y gracias por aguantarnos.

Space Woody/Jagger dijo...

Joer, ¿el EnanoDiving te deleita con esa música? Es brutal el videoclip de Ricchi E Povery. Si es que las actuaciones y videoclips de antes no son como las de ahora.

Troy McClure dijo...

Ay, vecino, por fin me hace caso. Primero torreznos rezumantes de aceite de colza, luego la canción en donde Super Mario toca el Casio... No ha sido hasta mi comentario cuando se ha percatado de mi verdadera identidad.

Prometo desvelarle los otros 4 dias de la semana con alguna cancion que realmente le guste, para que le coja mania.

Por cierto, que lo mismo sí que es cierto que nos conocemos. Le mandaré un privado, a partir del cual se puede perder el encanto del anonimato de los nicks. Los mierdecillas como yo nos venimos arriba cuando no hay que dar la cara y nos protege la internet.

LA NIÑA DE LOS MURALES dijo...

hola pasaba por aquí para saludar, es que ando muy liá y no tengo tiempo de asomarme, así que este finde daré el repasito...un saludo, chicos

61 y 49 dijo...

Hola a todos los presentes.

Wood, aunque sea una información que me cuesta desvelar es completamente cierto (ya lo decía, no exagero). En un día bastante cruel busqué esa canción en youtube y aumenté mi cara de espanto ante semejante muestra de alegría postmatrimonial italiana en un programa seguramente llamado Calabria, Qué Mafiosa Eres! El que se viste de Mario Bros no tiene precio.

Por favor Diving Buzo, asegúrate de ponerte unos zapatos de tacón mientras tanto y camina por toda las casa con ellos chillando el estribillo aunque no sepas la letra (y ahora que lo pienso, hazte una foto mientras lo haces). En un principio solía repetir una canción de Rocío Durcal que decía algo así como “voy a casarme vestida de blanco”, y ojo, no es que tenga nada en contra, pero reafirmó mi deseo de que mi boda la oficiase Rouco Varela y que sería yo mismo el que fuera vestido de blanco con algo prestado, algo azul y algo viejo mientras los Village People cantaban “Macho Man”. Uno que es así.

Prometo pasearme por Alcorcón con mi nueva camiseta de los Hi-Risers (risa maligna) para que me reconozca. Si soy ese que siempre se cuela en los bares para pedir antes que nadie evite llegar a las manos conmigo, no seré rival.

Hola Niña de Los Murales, sabes que tus visitas son muy queridas por aquí, con saber que aún sigues por ahí nos basta para que no nos vengamos abajo. Que somos de carácter débil y nos rendimos muy rápido.

Por cierto, para los que no conozcáis el proyecto perpendicular de La Niña de los Murales visiten ...yo yo que sé de eso...Mundo Ye-Ye donde prima una excelente música.

Un abrazo a todos.

Unknown dijo...

Mamma Maria!!!
nunca v´´i un casio tan bien tocado

61 y 49 dijo...

@Luis: tremendo videoclip. Para más información complementaria (y seguramente esclarecedora) diré que quién escucha esto por las mañanas (increible pero sigue siendo en serio) va de vacaciones a Marina Do´r, seguramente un lugar del que no se sientan... sientan, nuestros amigos del Levante.

61 y 49 dijo...

Hey Disha! estoy completamente de acuerdo contigo. Un placer volver a saludarte.

61 y 49 dijo...

Hey Disha! estoy completamente de acuerdo contigo. Un placer volver a saludarte.